martes, 13 de febrero de 2018

¿HASTA CUÁNDO SE HACEN ANTICIPACIONES QUE NO FUNCIONAN DEL TODO?

¿Hasta cuándo se hacen anticipaciones que no funcionan del todo? 1 Tasa de Política Monetaria (TPM), inflación (IPC) y crecimiento de la economía (PIB). Desde hace años revisamos la relación entre la Tasa TPM, la inflación y el crecimiento económico y hemos llegado a diferentes conclusiones que, dados los diferentes niveles de influencia en los decisores nacionales y en los medios de comunicación tradicionales, han sido acogidas con sutiles temores y con “respingo de narices”. Por una parte, consideramos que las decisiones que se toman en el Banco Central y le permite hacer anticipaciones sobre el futuro de la economía tienen contenidos que: (1) van más allá de la economía y por lo tanto debiera haber consejeros de otras profesiones (2) la TPM es sólo una tasa de interés que se podría perfectamente dejar a las fuerzas del mercado, ya que en el mercado hay muchas otras tasas de interés que operan , aparte de las muchas tasas de interés del exterior a las que tenemos acceso (también se creía que el precio del dólar debía ser fijado por “la Autoridad” y hoy día a casi nadie se le ocurriría pedir que se volviera atrás) (3) las cifras que se entregan por eventos futuros son simplemente posibilidades, con una desconocida probabilidad de ocurrencia, y las que se entregan no hacen las advertencias del caso para que las utilicen los decisores, (4) que eliminar la fijación de una TPM y dejarla libre sería una acción que daría beneficios similares para las partes que tienen recurso financieros disponibles y para las partes que requieren recursos financieros según sus potenciales y sus deseos y haciendo el mercado nacional más competitivo (5) y ¿Acaso no se podría demostrar que la fijación de una tasa básica produce situaciones y conmociones como las que hoy vive el mundo al tener que restituir, posiblemente en forma tardía, las tasas positivas de interés? 2. Frases de anticipación económica que se puede revisar. Por otra parte, hay frases que llaman la atención por lo contundente de su des-demostración. Tome por ejemplo la siguiente: “..una inflación baja y estable promueve un mejor funcionamiento de la economía y un mayor crecimiento económico, al tiempo que evita la erosión de los ingresos de las personas..” Se trata de que determinadas decisiones que indirectamente afecten la ocurrencia de un “fenómeno económico complejo” produzca resultados que son bienvenidos por todo el mundo. Entonces veamos algunos resultados de los últimos cuatro años (2014 a 2017): (1) la TPM fue a la baja desde un 4,5% a un 2,5%, (2) lo cual extrañamente llevó a que el IPC fuera a la baja desde un 4,6% a un 2,1% a fines de cada año (2) y aún más extrañamente que el PIB no creció sino que fue inferior al 2% (1,825%) anual promedio (y que venía de un cuatrienio que creció en promedio un 5,35%). Haga sus comparaciones y saque sus conclusiones. Es decir, una TPM a la baja debió haber producido un crecimiento de la economía, pero no hubo tal crecimiento durante cuatro años. ¿Tantos años se demora en hacer efecto la baja de la tasa o es que la TPM se debió bajar más rápidamente? Frases determinísticas como la que hemos señalado no ayudan a ser adecuadas explicadores para una teoría económica que muestra tantos puntos débiles, especialmente en materia de anticipación de crisis. No nos corresponde hacer sugerencias sobre otras actuaciones de la autoridad, pero si plantear este tema como una forma de manifestar que en el país hay instituciones que queremos que se tomen decisiones que realmente conduzcan al desarrollo económico para beneficio de las personas y de las empresas.